lunes, 22 de noviembre de 2010

Temario del examen trimestral del primer trimestre

LAMENTO QUE NO SE ENTIENDA.
COMO VEO QUE NO OS ACLARÁIS, OS LO ESCRIBIMOS. 

-LA PRIMERA PARTE ES SIN APUNTES. 

-LA SEGUNDA, DE 3 PREGUNTAS A ELEGIR DE ENTRE 6, CON APUNTES UN RATO: UNOS CINCO MINUTOS.  SACAREMOS 2 DE CADA BLOQUE DE PREGUNTAS; COMO HAY 3 BLOQUES DE PREGUNTAS, HAY... 6 PREGUNTAS.

-LA TERCERA, NUEVA ES,  Y YA SE ENTIENDE QUÉ HAY QUE HACER. 

¡ÁNIMO!






El examen tiene tres partes.

1ª PARTE DEL EXAMEN:
Preguntas de estudiar de memoria sin papeles: están en el blog. En concreto, aquí.


2ª PARTE DEL EXAMEN:
De 6 preguntas (2 de cada uno de los 3 bloques, que encontraréis aquí ) tendréis que responder a 3. 
Con dos características:
  1. hay que responder a la pregunta dando razones, y 
  2. hay que sacar esas razones de los textos, en caso de que la pregunta se refiera a alguno en concreto.

3ª PARTE DEL EXAMEN:
Escribir un breve comentario sobre un artículo actual, que tendrá que ver con lo que hemos dado.

viernes, 19 de noviembre de 2010

El amado y la mujer

… y le lanzó un beso que, suspendido en el cine, ella creyó ver volar e irse, o venir. Y partió, él, solo y a la aventura, sin saber su sino. Debía partir, rápidamente debía irse. Y dejarla. A ella la dejó en casa, con lágrimas en los ojos, de amor, o de tristeza.
Y, dice ella que vio a su amado cabalgar lejos, lejos de todo lo suyo. Y por el sendero del bosque, ése sendero que tantas veces los había visto pasear, y besarse, ahora se presentaba como paisaje a una despedida que se hizo corta, demasiado corta, quizás.
Y la mujer vio a su amado partir, creyendo que nunca volvería a verlo, y pensando que jamás querría a otro hombre más que a aquel, y el amado partió, pensando que, si encontrara a otra, no dudaría en amarla tanto o más como amó a aquella, que pretendió ser su amada, pero que no llegó ni a mujer del montón.

Azul y blanca rima

Azul y blanca rima
contrastas con el verde prado,
cristales de gotas salpicas,
que con el sol se van evaporando.

Río que surge de mi intención,
naturaleza abierta,
reflejas con clara sencillez
mi forma de comprenderla.

¿Comprender el qué?
la vida pues,
cristalina y oscura a veces,
simple, completa y dura.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Una imagen vale más que mil palabras

Una imagen vale más que mil palabras, y por eso las palabras utilizadas en La Odisea van llenas de adornos musicales y epítetos, para ayudarnos a imaginar y recrear una imagen en la mente.
Aunque en ocasiones las palabras pueden valer más que una imagen, de forma inmeditada creamos la imagen en la cabeza. ¿Y en el cine? ¿Y en una foto?
¿Resulta más fácil ver la terrible bestia de deformes pies y horrendas fauces, o leer y autointerpretar una descripción?

viernes, 12 de noviembre de 2010

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Aristóteles y el primer motor inmóvil

Ahí va. Id al siguiente enlace.

Sobre los mitos, un fragmento de C.S. Lewis

He aquí un fragmento de La experiencia de leer, de C.S. Lewis, en que se explica una parte de qué es un mito:

En primer lugar, recordemos que la palabra griega mythos no designa específicamente este tipo de historias sino cualquier historia. En segundo lugar, no todas las historias que el antropólogo clasificaría como mitos poseen la cualidad que me interesa analizar. Cuando hablamos de mitos -como cuando hablamos de baladas-, solemos pensar en los mejores especímenes y olvidar los restantes. Si examinamos pacientemente todos los mitos de determinado pueblo, la mayoría nos dejarán perplejos. Al margen de lo que hayan podido significar para los antiguos o para los salvajes, los encontraremos absurdos y chocantes. Chocantes no sólo por su crueldad y obscenidad, sino también por su aparente estupidez, casi como las historias de los locos. De esa maleza sórdida y vulgar emergen como olmos los grandes mitos: el de Orfeo, el de Démeter y Perséfone, el de las Hespérides, el de Balder, el de Ragnarok, o el de Ilmarinen forjador de los sampo. En cambio, ciertas historias que no son mitos en el sentido antropológico, pues han sido inventadas por individuos pertenecientes a períodos totalmente civilizados, poseen lo que yo llamaría «cualidad mítica». Es el caso de las tramas de El doctor Jekyll y el señor Hyde, La puerta en la muralla de Wells o El castillo de Kafka. También la posee el personaje de Gormenghast en Titus Groan de Peake, o los Ents y los Lothlorien de El señor de los anillos del profesor Tolkien. A pesar de estos inconvenientes, como mi única alternativa sería acuñar un nuevo término, utilizaré la palabra mito, porque me parece un mal menor. Quienes leen para comprender -me tienen sin cuidado los fanáticos del estilo- tomarán la palabra en el sentido que yo le doy. En este libro, un mito es una historia que tiene las características que enumero a continuación.
  1.  Es extraliteraria, en el sentido que ya he indicado. Quienes han accedido al mismo mito a través de Natalis Comes, de Lempriére, de Kingsley, de Hawthorne, de Robert Graves o de Roger Green comparten la misma experiencia mítica; se trata, de un contenido significativo, no de un mero máximo común divisor. En cambio, quienes han accedido a la misma historia a través de Romeus de Brook y del Romeo de Shakespeare sólo comparten un máximo común divisor, que en sí mismo carece de valor.
  2. El placer que depara el mito no depende en modo alguno de recursos narrativos como el suspense o la sorpresa. Ya la primera vez que lo escuchamos nos parece inevitable. El principal valor de esa primera experiencia consiste en el contacto con un objeto inagotable de contemplación -más parecido a una cosa que a un relato- que influye en nosotros por su sabor o cualidad peculiar, casi como una fragancia o un acorde. A veces, ya esa primera experiencia prescinde de todo elemento narrativo. No puede decirse que haya una historia en la idea de que Ragnarok se cierne tanto sobre la vida de los dioses como sobre la de todos los hombres buenos. Las Hespérides, su manzano y el dragón constituyen de por sí un mito poderoso, antes de que aparezca Hércules para robar las manzanas.
  3. En el caso de los mitos la identificación desempeña un papel muy reducido. Apenas puede decirse que nos proyectemos en los personajes. Son como espectros que se mueven en otro mundo. Sin duda, sentimos que sus evoluciones tienen una importancia profunda para nuestras vidas, pero no nos proyectamos con la imaginación en las suyas. La historia de Orfeo nos entristece, pero sentimos pena por todos los hombres en lugar de apiadarnos intensamente de él (como nos sucede, por ejemplo, con el Troilo de Chaucer).
  4.  El mito siempre es «fantástico», en una de las acepciones de esta palabra. Trata de cosas imposibles y sobrenaturales.
  5. Las experiencias que comunica pueden ser tristes o alegres, pero siempre son serias. El mito cómico (en el sentido que doy a la palabra «mito») es imposible.
  6. Esas experiencias no sólo son serias: además, nos infunden un temor reverencial. Sentimos la presencia de lo numinoso. Es como si se nos comunicara algo trascendente. El hecho de que la humanidad nunca haya dejado de forjar explicaciones alegóricas para los mitos revela los reiterados esfuerzos de la mente por tratar de aferrar -sobre todo mediante conceptos- ese algo que nos transmiten. Y una vez ensayadas todas las alegorías, seguimos sintiendo que el mito es más importante que cualquiera de ellas.
Estoy describiendo los mitos, no explicando su existencia. No me interesa en absoluto averiguar las causas de su aparición, determinar si constituyen una manifestación primitiva de la ciencia, restos fósiles de los ritos, invenciones de los hechiceros o afloraciones del inconsciente individual o colectivo. Lo que me interesa es su efecto en la imaginación consciente de mentes similares a las nuestras, no su hipotético efecto en mentes prelógicas ni su prehistoria en el inconsciente. Porque sólo el primero se puede observar directamente o puede situarse a tiro de los estudios literarios. Cuando hablo de los sueños, me refiero, y sólo puedo referirme, a los sueños tal y como los recordamos al despertar. Análogamente, cuando hablo de los mitos, me refiero a los mitos tal como podemos experimentarlos: o sea, a los mitos no creídos sino contemplados, presentes ante la imaginación plenamente despierta de una mente lógica. Sólo me ocupo de la parte del iceberg que aparece en la superficie; sólo ella tiene belleza, sólo ella es un objeto de contemplación. Sin duda, debajo hay muchas otras cosas. El deseo de investigar esa parte sumergida está plenamente justificado desde el punto de vista científico. Pero me temo que ese estudio resulta atractivo, al menos en parte, como consecuencia del mismo impulso que explica la invención de las explicaciones alegóricas de los mitos. Es un esfuerzo más por aferrar, por atrapar con conceptos ese contenido trascendente que parecen transmitirnos.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Sobre Homero, una introducción

Léela aquí

Cuestionario para el examen sobre textos bíblicos

20. ¿Qué quiere decir Jean Jaurès, en referencia a la lectura de textos bíblico, cuando le pregunta a su hijo "¿Querrás tú condenarte a saltar páginas en todas tus lecturas y en todos tus estudios?"

21. ¿Qué aporta a la cosmovisión europea lo que puedes leer en Deuteronomio 30, 14-15?

22. Explica, según el texto de Ecclesiastés 2, qué versión del posterior carpe diem legó la Biblia a la sociedad europea

23. ¿Qué tres explicaciones posibles tiene el Cantar de los cantares? ¿Qué imagen de Dios, que la cosmovisión europea acogió, muestran estas tres explicaciones?

24.  ¿Qué implicaciones tiene en la cosmovisión europea Éxodo 3, 14? ¿Qué importancia tenía le nombre para los judíos? Relaciónalo con Juan 8, 1-33.

25. Compara cómo tratan al mundo y al hombre las cosmovisiones babilónica y judía según el texto e información que se refieren al Enuma Elish, y la del Génesis1, 1-31.

26. ¿Qué añade a Génesis 1, 1-31 el texto de Juan 1, 1-51?

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Algunos idiomas de la Biblia

Son tres: hebreo, griego y arameo. Luego se tradujo, en varias ocasiones, al latín.

He aquí un cuadro de Velázquez muy claro al respecto. En el letrero se lee "Jesús Nazareno, Rey de los judíos" en los tres idiomas del imperio: hebreo (en esa zona palestina), en griego, y en latín. Si aprietas en la foto, la verás ampliada, y, una vez se te abra, la puedes ver aún más ampliada: hasta ver con claridad los caracteres hebreos del alefato, los griegos del alfabeto, y los latinos del abecedario.


martes, 2 de noviembre de 2010

Enuma Elish

Para ver qué diferente es el texto del Génesis, en lo comentado en clase, con el "Enuma Elish"

 

Enûma Elish

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Enûma Elish es un poema babilónico que narra el origen del mundo. Enûma Elish significa en acadio "cuando en lo alto", y son las dos primeras palabras del poema. Está recogido en unas tablillas halladas en las ruinas de la biblioteca de Asurbanipal (669 a. C. - 627 a. C.), en Nínive


Cada una de las tablillas contiene entre 115 y 170 líneas de caracteres cuneiformes datados del año 1200 a. C. El poema está constituido en versos de dos líneas, y la función del segundo es enfatizar el primero mediante oposición, por ejemplo:


"Cuando en lo alto el cielo no
había sido nombrado,
no había sido llamada con
un nombre abajo la tierra
firme".
Según esta cosmogonía, antes de que el cielo y la tierra tuviesen nombre (no tener nombre equivalía a no existir), la diosa del agua salada Tiamat y el dios del agua dulce Apsu, engendraron una familia de dioses con la mezcla de sus aguas, y estos a su vez a otros dioses. Estos nuevos dioses perturbaban a Apsu, que decidió destruirlos. Aunque uno de ellos, Ea, se anticipó a los deseos de Apsu haciendo un conjuro y derramando el sueño sobre él, para luego matarlo. Ea, o Nudimmud, el dios parricida, junto a Damkina, engendró a Marduk, el dios de Babilonia. Al tiempo, Tiamat es convencida de tomar venganza y rebelarse, decide dar mucho poder a Kingu, su nuevo esposo, y le entrega las tablillas del destino. Marduk es nombrado por los dioses para enfrentar a Tiamat, accede con la condición de ser nombrado "príncipe de los dioses o dios supremo", finalmente vence a Tiamat y la mata. Luego le son arrebatadas las tablas del destino a Kingu. Marduk, exultante, planea realizar obras estupendas y las comunica a Ea: Amasaré la sangre y haré que haya huesos. Crearé una criatura salvaje, 'hombre' se llamará. Tendrá que estar al servicio de los dioses, para que ellos vivan sin cuidado. Kingu es condenado a morir por ser el jefe de la rebelión, y, con su sangre, Ea crea a la humanidad. En honor a Marduk se construyó el Esagila en el Etemenanki.
El poema es la historia de la eterna lucha entre el Orden y el Caos, puesto que muestra el prototipo del guerrero que lucha contra el Caos, pese a no conseguir derrotarle nunca, por lo que la lucha es constante. Por ello, Marduk, dios de la luz y el orden, debe vencer a Tiamat, quien representa a la oscuridad y el Caos.